martes, 26 de abril de 2011

Pongamos que hablo de Madrid


Ayer por la noche volví a Madrid después de dos semanas de vacaciones rodeadas de los míos, y la vuelta fue un poco dura…


Todo aquel que me conozca un poco sabe que Madrid me encanta. Me parece una ciudad con posibilidades infinitas, donde te puede pasar casi cualquier cosa (buena o mala) y eso es lo que siempre he querido yo: posibilidades. Vengo de un sitio no muy grande, tampoco muy pequeño, pero seamos sinceros, cuando llevas 22 años viviendo en el mismo sitio ya conoces a todo el mundo, casi siempre hay las mismas cosas por hacer, los mismos sitios a donde ir….y a mí eso me  agobia si paso mucho tiempo en el mismo lugar.


Pero ahora es diferente, y no entiendo por qué. Cada vez que voy me cuesta un poquito más volver, aunque a los días se me pasa porque vuelvo a acostumbrarme al ritmo de vida que llevo aquí, pero al principio es insoportable: estoy desganada, no me apetece hacer casi nada y me cuesta horrores ponerme a hacer lo que debería. Quizá sea porque me dejo a mucha gente allí, sobre todo a mi familia. Siempre he sido una persona extremadamente familiar, me encanta rodearme de los míos y que nos juntemos todos, cualquier excusa es buena: un cumpleaños, un domingo, una cena…Cuando voy me encanta estar con todos, pero especialmente con mis dos enanas Pilar y Lucía, que están cada día más grandes y me da pena perderme las cosas que van haciendo día a día.


Si lo pienso bien, “sólo” me quedan 2 meses en Madrid (hasta finales de Junio) y luego tendré por delante todo el verano para estar con mi gente, pero como siempre pasa, cuando lleve allí 1 mes querré volverme pero ahora mismo lo que me gustaría es estar tirada en el sofá mientras mi madre me acaricia el pelo.

3 comentarios:

  1. Exactamente nena, cuando te des cuenta tendras en las más soleada de las estaciones las caricias de tu mama sobre tu cabello. Muy emotivo, me ha encantado. Un beso.

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  2. Nunca he vivido en un lugar distinto al que nací, creo que nunca fui valiente para hacerlo. Me gusta donde vivo, me gusta estar "en casa" y por suerte lo que estudio puedo hacerlo aquí.
    Pero tengo amigas, una en especial, en tu situación... Así que solo te puedo decir que ¡tus amigos de Madrid te cuiden! es lo más cercano a la familia...

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  3. Yo soy de Madrid y me pasa exactamente lo mismo que a ti pero en caso contrario, cuando me voy de vacaciones dos semanas a la playa en agosto, o me voy una semana a el pueblo de mis tíos añoro muchísimo Madrid. Ademas no m sienta bien el aire fresco, me ahogo. Cuando vuelvo me da ganas de poner la cara en un tubo de escape jajajajaja!! Disfruta del tiempo que te queda aquí que no queda nada para volver con los tuyos.

    MUÁ!

    Ellen

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